28 Jan 2011

Pérou : En train de Puno à Cuzco et la danse des diables de Puno

Voyage dans les hauteurs andines, par la voie ferrée panoramique qui relie Puno à Cuzco.
Viajar en la aturas andinas, por via ferrea paroramica que une Puno y Cusco.


La danse des diables de Puno ( Région sud du Pérou).
La danza de los diablos de Puno.

Una tropelía a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos

Se pretende expropiar una superficie de 40 000 metros cuadrados a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, para crear otra Universidad. Una tropelía desastrosa y lamentable por parte del gobierno hacia la Universidad Pública.  

Las universidades públicas en el Perú, se encuentra en una situación de calamidad, tanto por su gestión administrativa, así como lo grave y preocupante es el total abandono por parte del Estado para invertir en el conocimiento de su pueblo. Esta real situación es inadmisible!.

Lo más patético de esta realidad es cuando algunas autoridades buscan lucrar con la educación, permitiendo así la creación de nuevas universidades por doquier, sin preocuparse por mejorar la situación de la actuales universidades públicas. Es así como hoy una vez más la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), la Decana de América, se ve burlado y mutilado por los apetitos mezquinos de algunas autoridades, tal como podemos leer el nuevo proyecto ley para la creación de la Universidad Nacional Tecnológica de San Juan de Lurigancho (UNTSJL), firmado el 14 de enero del 2011 por César Zumaeta Flores (Presidente del Congreso de la República) y Alejandro Aguinaga Recuenco (Primer Vicepresidente del Congreso de la república); para su pronto promulgación por el Señor presidente de la República del Perú. 
Para ver el Proyecto Ley aquí.
Con este nuevo proyecto, se verán despojados de sus instalaciones de las sedes de Facultad de Electrónica, Ingeniaria Quimica et Agro Industrias y el Centro Pre Universitario, que tienen una superficie de cuarenta mil metros cuadrados  (40 000 metros cuadrados) incluido su inversión en infraestructura que hizo la UNMSM.

Tambien, se agrava el recurso de la universidad, porque la actual renta de esa nueva universidad "tecnológica" ( lo pongo entre comillas,porque no hay razón para llamarla así, por sus facultades que ofrece), serán las partidas actuales de la universidad,es decir menos dinero para UNMSM. 

Estos terrenos y los otros que la San Marcos tiene, los debe utilizar en la creación de nuevas escuelas especializadas ( de una verdadera tecnología de punta), modernos laboratorios, modernos complejos deportivos, bibliotecas con salas de estudio e internet, residencias universitarias modernas, auditorios modernos, etc; donde se puede hacer viable y sostenible y crecer como institución. 

La universidad es el lugar donde uno desarrolla su potencial humano, debatiendo, analizando e investigando los problemas de la realidad nacional e internacional en sus diversas disciplinas científicas y sociales; como tal no es necesario crear universidades, sino mejorar y equiparlas sus laboratorios de la que ya existen.

La UNMSM, esta perdiendo grandes posibilidades de convertirse en la mejor universidad, al ceder este terreno muy fácilmente a proyectos intrascendentes; esperemos que las autoridades y alumnos reacciones sobre este tema, y anular ese proyecto ley.

Habrá que hacerle entender al gobierno que crear mas universidades, despojando propiedades de las otras , mejorará la educación? Creo que no.
 
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27 Jan 2011

Las Reservas Mundiales de Petróleo y el Consumo de Combustibles Fósiles

El mundo no está mostrando ningún signo dejar los combustibles fósiles: en el lapso de 28 años cubiertos por los datos de BP ( ver en la parte inferior el reporte ver la DATA), las reservas mundiales de petróleo cayó sólo en oportunidades,en 1998 y 2008.
DATA: Fossil fuel consumption and oil reserves
El petróleo ha sido de combustibles fósiles líder mundial de opción desde la década de los 60 y nuestro gusto a ello no parece probable para disminuir en un corto plazo.
Las compañías petroleras están todavía dispuestos para asegurar cualquier reserva no descubierta sin dejar de ser una presencia de grupos de presión muy poderosos.
Países de la OPEP controlan la mayor parte, con el 76% de las reservas del mundo. Curiosamente, muchas de las reservas probadas de los países de la OPEP apenas han cambiado en los últimos 20 años, a pesar de la actividad de exportación masiva.
El mayor crecimiento porcentual en la riqueza petrolera se encuentra en Vietnam, con un aumento del 39% en sus reservas probadas de petróleo de 2007-08. Esta nueva riqueza corresponde a 1,3 mil millones de barriles, lo que puede parecer mucho, pero que alimentarían la demanda mundial en menos de tres semanas (17 días) en 2008 los niveles de consumo.
El consumo de petróleo cayó un 0,29% a partir en 2007-08, mientras que su relación de contaminación de carbono vio un aumento del 3% en su uso. Razones para la reciente subida del carbón incluyen el bajo precio de la promoción creciente del combustible como clave para la "seguridad energética".

26 Jan 2011

¿Don Nadie? ahora no. El Joven Que Cambio la Realidad de Túnez

Toda esta historia empezó el 17 de diciembre del 2010, en Túnez, cuando un vendedor de frutas por las calles decidió reaccionar contra quienes de alguna forma amordazaban a todo un país, violando los derechos básicos o simplemente estabas condenado a recibir sanciones si estabas en contra del gobierno.
Se trata de Mohamed Bouazizi que soñaba con comprarse una camioneta y ampliar el negocio, pero nunca con convertirse en un héroe nacional. Él era, simplemente, un vendedor de fruta. Desde muy pequeño, su vida había sido esa: comprar fruta y verduras y arrastrarlas en un  "carrito" hasta la plaza principal de Sidi Bouzid, una ciudad perdida en el mapa de Túnez. El destino le escogió, sin embargo, y el 17 de diciembre, desesperado, frustrado, sin horizontes, se echó encima un bidón de gasolina y se prendió fuego. Así empezó todo. Así estalló la revuelta popular que ha derribado la dictadura de Zine el Abidine Ben Ali y ha cambiado de golpe el mapa político de Túnez, en menos de un mes trepidante de movilizaciones y acontecimientos. Y quién sabe si también el porvenir de algún otro país ( ahora ya se extendió a Egipto, inspirados en el héroe de Túnez ). No ha sido sin costes. Mohamed Bouazizi murió abrasado en el hospital de Sfax, el 4 de enero, y su familia todavía no ha recibido una ayuda especial, solo el consuelo de ver que su muerte no ha sido en vano. Mohamed vivía en el barrio de Hainur, donde todavía se ven casas de adobe y el asfaltado se difumina poco a poco entre descampados repletos de bolsas de basura. La casa de Mohamed, que perdió a su padre a los tres años, es de una planta, con tres pequeñas habitaciones, baño y cocina. Y en ella viven ocho personas. Con él eran nueve.

"Era una persona muy tranquila y sonriente a la que le gustaba ser vendedor. Se dedicaba a ello desde los 10 años para dar de comer a la familia. Estudiaba y trabajaba al mismo tiempo, pero nunca terminó el bachillerato. Aportaba dinero para que su hermana Leila pudiera estudiar en la universidad, en Monastir. Nadie más tiene empleo en la familia. Por la noche compraba la mercancía que vendía al día siguiente. Algunas jornadas ganaba 10 o 15 dinares [ocho euros]. A menudo, menos", relata Samia, hermanastra de 19 años.
La familia Bouazizi, tan pobre como rica en buenos modales, no tiene ni para invitar a un té. Mohamed, que dejó una deuda de 150 euros, el dinero que empleó en adquirir la última mercancía, tenía dos hermanos -Salem, de 30 años, y Leila, de 24- y cuatro hermanastros. Su madre, Manubia, de 55 años, tuvo cuatro hijos más con Ammar: Samia, de 19; Basma, de 16; Karim, de 14, y el pequeño Ziad, de 8 años. Todos comparten la vivienda.
Mohamed había abandonado el colegio a los 19 años y solicitó su ingreso en el Ejército, pero fue rechazado. Muchas veces los policías le robaban el género. Otras lo desparramaban por el suelo y tenía que salir corriendo. Nada extraño en el Túnez rural, habituado a la rampante corrupción policial, a la exigencia de mordidas, al abuso de poder, a la prepotencia de los agentes y al miedo que causaban entre los 40.000 vecinos de la ciudad. Un día de Ramadán, el pasado verano, le tiraron una vez más el carrito y sufrió una crisis nerviosa. Hubo que llevarle al hospital. "Yo nunca sospeché que esto podía ocurrir", cuenta Samia. Mohamed siempre sonreía. Parecía feliz.
"A las 8.30 del 17 de diciembre salió de casa. Como siempre. La policía le pidió dinero para permitirle que siguiera vendiendo, pero él se negó a dárselo, como todos los días. Le intentaron arrebatar la balanza. Y Feida, una funcionaria municipal, le dio una bofetada", relata esta estudiante, alta como todas sus hermanas, subrayando el nombre de esa mujer. Un hecho, el tortazo, que no puede ser desdeñado, porque en las conservadoras sociedades árabes, ser humillado por una mujer supone una terrible ofensa para un hombre. "Dos policías le golpearon las piernas", continúa Samia. "Nadie le ayudó. Feida insultó al padrastro de Mohamed cuando este fue a recuperar su mercancía al Ayuntamiento, y se volvió a encontrar con la funcionaria, que le cerró la puerta. Mohamed dijo que iba a quejarse al Palacio de Gobierno, y la mujer se burló de él. ¿Quien iba a hacer caso a un don nadie. Salió del edificio, compró un bidón de gasolina de cinco litros y se quemó vivo delante de dos policías. Creo que llegó a pensar que no tenía ninguna esperanza".
Mohamed Bouazizi falleció por las quemaduras el 4 de enero, a los 26 años, una semana después de que el presidente Ben Ali se acercara a visitarle al hospital de Sfax -110 kilómetros al este de Sidi Bouzid- y se dejara retratar a su lado. Un cuerpo inerte, una momia completamente vendada. Ignoraba Bouazizi el testamento que legaba a Túnez y a los demás países árabes. Una deflagración enorme, un cataclismo político que ha puesto Túnez patas arriba y ha desatado una oleada de suicidios a lo bonzo en el Magreb y otros países musulmanes.
Era un hombre entregado en cuerpo y alma a sus parientes al que ni siquiera le gustaba el pasatiempo que causa furor en cualquier país árabe. "No le gustaba el fútbol", recuerda Ramzi, primo del fallecido, considerado ya un mártir de la patria. "Era inteligente, y a veces me leía textos en árabe culto que yo no entendía", explica Ramzi. Pero no tenía estudios superiores. "Nos sorprendió mucho cuando leímos que era licenciado en Informática", comenta Asma, una vecina de Hainur. "Sí estudiaba algo de inglés, francés, alemán e informática, pero por su cuenta", corrobora Samia. "Ahora no tenemos dinero para comprar comida. Nadie del Gobierno nos ha llamado, ni nadie del municipio. No hay justicia, alguien tiene que ayudarnos", dice en voz baja Samia, que intenta consolarse: "Tras la muerte de Mohamed parece que puede llegar la libertad. Gracias a él, mucha gente sonríe un poco más cada día porque se ha ido el dictador".
Sidi Bouzid era una ciudad propicia para un estallido de esta envergadura. Pero hay muchas más así en Túnez. Como hay docenas de miles de desesperados bouazizis. Azmouni Attia, dirigente en la ciudad del opositor Partido Democrático Progresista, explica: "En Sidi Bouzid, los campesinos ya venían exigiendo que se arreglaran problemas de transporte y de acceso a los campos de cultivo y que se asfaltaran algunos caminos. También hubo manifestaciones delante de la central lechera porque había retrasos en el pago de salarios. Las protestas venían de lejos, pero eran aplastadas por la policía. Se hablaba constantemente de la represión, pero el miedo era atroz. El Reagrupamiento Constitucional Democrático (CRD), el partido de Ben Ali, se transformó en parte del aparato policial. Quien se quejaba era denunciado". "Nada más conocerse el suceso", prosigue, "la gente hizo una sentada delante del edificio del Gobierno regional. Fui al hospital y solo le vi la cara quemada. Respiraba muy mal".
El régimen todavía tenía aliento y nadie sospechaba lo que sucedería menos de un mes más tarde. Desde el mismo día en que Mohamed se inmoló, la policía reprimió cualquier conato de protesta en Sidi Bouzid. Pero era tarde. En cuestión de horas, miles de tunecinos se alzaron contra el Gobierno en Kasrine y en Gafsa, capital de una cuenca minera que en 2008 vivió graves disturbios. Las manifestaciones estaban prohibidas, pero la odiada dictadura tampoco quería impedir que la multitud saliera a las calles cuando Israel lanzó la guerra contra Gaza en diciembre de aquel año. "Los manifestantes aprovechaban que podían gritar para hacer juegos de palabras en los que arremetían contra el RCD", recuerda Attia.
La mancha de aceite se extendió en muy poco tiempo a Thala, Douz, Tozeur... Pero la capital aún permanecía en calma. Y Ben Ali todavía se creía a salvo cuando visitó, el 28 de diciembre, a Bouazizi postrado en la cama. Mientras, los tunecinos se entregaban a Internet y a Facebook -censurado a menudo y, en una ocasión tiempo atrás, durante cinco meses- para convocar manifestaciones. Sin Internet, sin Facebook y sin Al Jazeera, la revolución habría sido imposible, coincide todo el mundo. Fathi Chamkhi, profesor de geografía y miembro de la Liga Tunecina de Derechos Humanos, se explaya sobre el origen de la rebelión. "Es una revolución social y democrática. Es democrática porque hay reivindicaciones concernientes a las libertades políticas, y social porque existen demandas económicas y laborales. Hay una acumulación de hechos durante 23 años, a lo que se suma la crisis mundial de 2008. El régimen siempre decía que a Túnez no le afectaría y que pronto todo volvería a su cauce. Pero Túnez estaba seriamente afectado. Además, hay otros elementos que no son materiales. Estaba muy extendido el sentimiento de humillación y de injusticia. Conforme la vida cotidiana se iba haciendo más difícil, la gente observaba la opulencia en que vivía la familia presidencial. Era insultante, sobre todo, la actitud arrogante de los Ben Ali. Observabas a quien te estaba robando y además te pedían caridad. Mirabas la televisión y recibías una bofetada. La revuelta nace de la frustración. Aunque no hubiera sucedido en aquel momento, habría terminado ocurriendo". El descaro del déspota y su camarilla -la familia Trabelsi, apellido de soltera de Leila Ben Ali, la peluquera con la que el mandatario contrajo matrimonio en segundas nupcias, y las familias Mabrouk y Zarrouk- alcanzaba cotas insoportables. Saquearon el patrimonio nacional, se apoderaron fraudulentamente de empresas, concesiones de telefonía, de grandes superficies comerciales, de concesionarios de automóviles, de compañías aéreas, de canales de radio y televisión, de bancos...
El 11 de enero, el Gobierno comenzó a mostrar señales de nerviosismo cuando Ben Ali destituyó al ministro del Interior, Rafik Belhaj Kacem, y ordenó el cierre de universidades y escuelas. No se autorizaba que las personas formaran grupos de más de tres o cuatro personas, y uno no podía detenerse en la calle. Se trataba por todos los medios, los de siempre, de que la revuelta no se instalara en la capital. Porque eso son palabras mayores. Pero fue en vano. Al día siguiente, en la capital y sus suburbios, donde residen alrededor de dos de los once millones de tunecinos, la revolución dejó de ser cosa de desharrapados, de campesinos y de obreros empobrecidos, aún más, por la crisis global de 2008. A ella se unieron hombres y mujeres de toda condición, abogados, blogueros, artistas, arquitectos, las élites intelectuales y amas de casa, estudiantes y raperos. Como el que cantó: "Presidente, tu pueblo está muerto". Fue detenido y golpeado en comisaría.
Las clases medias y muchos de los más pudientes -con estudios universitarios, licenciados en la parisiense Sorbona- también se pusieron en pie para demandar libertades políticas y civiles, y la instauración de un régimen democrático. Porque en Túnez, donde no escasea la gente con formación académica, el sistema educativo fue una prioridad para el padre de la patria Habib Burguiba, que rigió el país durante tres décadas, desde que Túnez obtuvo la independencia de Francia en 1956. También lo fue, al menos en sus primeros años de gobierno, para Ben Ali. El analfabetismo es tan reducido como minúscula ha sido la capacidad de la oposición, perseguida sin tregua, para organizarse.
Por eso la Intifada tunecina fue espontánea, porque todo sindicato u organización estaba sometido al férreo escrutinio del régimen. "Soy profesor de español en la Universidad y sé perfectamente quiénes son los supuestos estudiantes que elaboran informes para el Gobierno. Tenemos que tener mucho cuidado con lo que decimos en clase", contaba el jueves Kamel Sahli. Era un país donde los chivatos se enseñoreaban, donde pronunciar el nombre de Ben Ali sin alabarle acarreaba contratiempos o penas de prisión. Muchos jóvenes le llamaban El Cantante o Eminem, por esa pose de artista que se reflejaba en varias de sus omnipresentes fotografías.
Tres días antes de su fuga a Arabia Saudí, la avenida de Habib Burguiba de la capital parecía un enorme cuartel. Vestían de paisano, pero los policías, por docenas en cada rincón, vigilaban todo movimiento. Desde el 12 de enero, los tunecinos durmieron poco. En las ciudades del sur, los francotiradores causaban estragos desde el 17 de diciembre. La gente caía bajo las balas, pero ya nada les disuadía de salir a la calle. Habían perdido el miedo. En la capital, las protestas proliferaban y los eslóganes se repetían. "Pan, agua, y no Ben Ali", "La libertad se consigue con sangre", "Policía asesina", "Túnez libre", "Ben Ali, fuera", "No queremos un presidente para toda la vida". "El ministro del Interior es un terrorista", "Ben Ali, cobarde", "Bouazizi dejó un mensaje: no queremos a los Trabelsi". "Ya no tenemos miedo". "Ben Ali, asesino", chillaban catedráticos y profesores a la cara de los policías, en el campus de Al Manar.
El dictador estaba ya desesperado y contra las cuerdas. El jefe del Ejército, Rachid Ammar, le había espetado ese día: "Estás acabado". Pero el presidente -que destituyó a Ammar, aunque tras la partida del tirano volvió al mando- aún se resistía. Había prometido dos días antes que crearía 300.000 puestos de trabajo en dos años y que las fuerzas de seguridad no dispararían contra los civiles. Y a la población le entró la risa. Compareció el día 13 por la noche para anunciar que no se presentaría a la reelección en 2014, y que reduciría el precio del pan, la leche y el azúcar. Y los tunecinos reaccionaron con sarcasmo: "Que suba el precio del pan, pero Ben Ali, a la horca".
Y llegó el día decisivo, el que dará nombre a plazas y avenidas, el 14 de enero. Esa jornada, y por primera vez en 23 años, los imanes no pidieron, al llamar a la oración, que Alá preserve la salud de Ben Ali y su familia. Por la mañana se habían citado los manifestantes, a las nueve de la mañana, ante la sede de la Unión General de Trabajadores, en una pequeña plaza en pleno corazón de la ciudad. Eran unos pocos cientos. El joven empresario Yousef Farhat comentaba: "O Ben Ali se va o dispararán. No tiene otra opción".
Marcharon hacia la avenida de Habib Burguiba, donde aguardaba un cordón policial. La muchedumbre empezó a cantar el himno nacional, del que Ben Ali eliminó años atrás una estrofa alusiva a la revolución y al combate. Minutos después, los policías se apartaron. Andando deprisa, se toparon con otra fila de antidisturbios más nutrida, y un funcionario, megáfono en mano, trató de convencer a la masa para que se detuviera. En vano. Los uniformados de negro cedieron el paso y mientras cientos de personas se sumaban al grupo, llegaron ante la sede del Ministerio del Interior. Ahí se plantaron durante seis horas. La emoción y el ímpetu de los 10.000 manifestantes lo dominaban todo. Muchos quedaron afónicos. Llevaban fotos de Mohamed Ali Hammi y Habib Ashur, héroes de la independencia, y varios también de Mohamed Bouazizi. "Si Ben Ali no se va, bloquearemos el país", aseguraban. "23 años de dictadura no se borran con palabras". Se rompían periódicos para tirar papelitos al aire. "¿Dónde está Francia, campeona de los derechos humanos?", se preguntaban. El ambiente era festivo.
A las 14.38 acabó la fiesta. Un bote de humo impactó en la multitud. Todo el mundo salió despavorido. Los disturbios se extendieron por el centro de la capital durante horas. Pero el régimen ya había muerto. La revolución blanda había defenestrado lo que algunos califican de "monarquía republicana". Sin duda, ya hacía algunas horas que Ben Ali y sus secuaces hacían las maletas. El piloto de Tunis Air Mohamed Ben Kilani se negó a despegar si dos hermanos de Leila Trabelsi embarcaban en un vuelo que precedió al de Ben Ali, y se convirtió poco menos que en héroe nacional. A las seis de la tarde, un avión despegaba del aeropuerto internacional de Cartago. El paladín de la lucha contra el islamismo -miles de miembros del partido En Nahda (Renacimiento) fueron perseguidos con saña, asesinados o partieron al exilio desde que hace 20 años fue ilegalizado el movimiento fundamentalista-, el represor de los comunistas y de todo disidente, a los que se despojaba de su empleo, escapaba hacia Arabia Saudí.
Tras la huida del presidente, el caos se instauró en Túnez. Convertidos en matones, miembros de la guardia presidencial y de la policía intentaron sembrar la anarquía a tiro limpio. Los más pobres también se dieron al saqueo de supermercados y con especial saña de las mansiones de los Trabelsi y los Ben Ali. El Ejército, adorado por el pueblo, se ocupó de restaurar el orden, al tiempo que la policía se esfumaba. 78 personas han muerto hasta ahora en la revolución.
Los grandes carteles con la figura del dictador fueron quemados y arrancados de sus soportes y el RCD iba camino de la disolución. Y ahora se habla de liberación de presos políticos; de una comisión independiente para investigar la corrupción; de libertades políticas; de libertad de prensa, después de años de medios de comunicación secuestrados por el aparato de poder; de reformas democráticas y constitucionales; de la organización de elecciones; de la desaparición de detenidos que nunca han regresado a sus hogares; de la ley 404 -promulgada para censurar Internet-; de la necesidad de restablecer la calma para reanimar el turismo y la inversión extranjera, vitales para el país...
"Todo empezó aquí, en Sidi Bouzid, como podía haber comenzado en cualquier ciudad de Túnez. Ahora buscamos un futuro para quienes han muerto en esta revuelta", dice Saad Kaddusi, un joven profesor que, por la noche y al calor de una hoguera, vigila en compañía de una docena de hombres, en un enorme descampado, para que los esbirros de Ben Ali no hagan de las suyas. Algunos sueltan sus palos para mostrar sus heridas o la sangre todavía impregnada en la ropa. El monumento al 7 de noviembre, fecha del golpe de Estado que alzó a Ben Ali al poder, ha sido profanado con pintura roja. Una profanación más que bienvenida. La avenida de Habib Burguiba de Sidi Bouzid está repleta de pintadas con el nuevo nombre con que los vecinos quieren bautizar la calle. Los 11 millones de tunecinos y gran parte del mundo árabe nunca le olvidarán. Feida, la funcionaria, se equivocaba. Mohamed Bouazizi ya es alguien.

Refereencia: El pais.

16 Jan 2011

Honor quechua, una lengua que debe ser cuidada


Demetrio Túpac Yupanqui es uno de los pocos intelectuales que hablan español y quechua (cusqueño) y ha hecho de ésta, la lengua oficial del Perú, un motivo de orgullo.

Demetrio Túpac Yupanqui, el “sabio”, en palabras del rey de España, tiene en su sala-aula del segundo piso de su casa en La Perla, Callao, una pared con algunos ‘cuadros’ que recuerdan los momentos más importantes de su existencia. Se trata de su academia Yachay Wasi, donde cultiva el espíritu quechua.

“Al rey de España lo conocí cuando era muy joven, cuando vino por primera vez al Perú”, me dice Túpac Yupanqui, y me enseña un recuadro donde imprimió una carta digital aparecida en el último número de la revista Quetzal (para los que hacen esa ruta turística), “no merezco el título de sabio que me pone el rey”. Se lo dice, mencionando la traducción al quechua que hizo del Quijote de la Mancha en el año 2006.

14 Jan 2011

Las diez cosas que Facebook no le contará

Aunque el ascenso de la red social ligada a Mark Zuckerberg ha sido meteórico, aún quedan varios obstáculos en el camino.
Por Jami Makan de SmartMoney
1.- "Estábamos en el lugar indicado en el momento preciso".
En la taquillera película "La red social", un estudiante universitario cuya novia lo dejó tiene como reacción construir un crudo precursor del sitio web "Thefacebook". Y mientras Mark Zuckerberg, el emprendedor retratado en el filme, ha dicho que esta novia "no existe en la vida real", el éxito de su invención es cualquier cosa menos ficción. Facebook tiene 500 millones de usuarios regulares, un aumento frente a 100 millones de hace dos años, y ahora es el sitio más visitado en EE.UU., según el rastreador de datos Hitwise.

9 Jan 2011

Ciencia:Tiempo de las super calculadoras / L'heure des supercalculateurs

El avance y desarrollo de un país, se puede medir por la calidad d evida de sus habitantes, el acceso a los servicios básicos, la educación y sobre todo cuando se invierte en Ciencia y Tecnología, prueba de ello, hoy podemos ver a los EE.UU. como el líder mundial en este campo seguido de los países europeos y algunos del continente asiático.

Hoy podemos ver la utilización de las super-calculadoras, para beneficio y avance de un país  e incluso para prevenir algunos fenomenos naturales.

A continuación el vídeo (en francés: L'heure des supercalculateurs) de las super-calculadoras.

8 Jan 2011

Cuando James Blunt le canta al amor, la alegría, la felicidad y la esperanza

Debo decirles que  esta publicación esta muy  lejos de lo que normalmente acostumbro hacer; pero lo hago con la sencilla razón de compartir a un gran cantante que hasta hoy viene obteniendo reconocimientos internacionales por la calidad de su trabajo y talento innato, que no fueron expresados públicamente durante su vida militar.

Conocido artísticamente como James Blunt, cuyo verdadero nombre es James Hillier Blount, nació en Tidworth, Wiltshire, Inglaterra, el 22 de febrero de 1974.
Es un cantautor de origen británico que alcanzó la fama en el 2005 con su álbum debut Back to Bedlam y su sencillo «You're Beautiful».
James Blunt despues de su carrera militar, ahora nos interpreta y escribe temas donde expresa el amor, la felicidad, el deseo, sus sueños, la esperanza; así como también le canta a la persona que hoy ya no esta con él.
Escuchemos a este magnifico cantautor, que tiene las palabras exactas para expresar o decirles a la persona que uno lo quiero o lo ama;  pero para eso esta James Blunt para que por medio de sus canciones podemos acércanos, alejarnos, llegar hacia la persona e incluso reconquistar, ¿Por qué no? o simplemente expresarle con la máxima extensión el verdadero amor.

A continuación, transcrito un extracto de tres de sus canciones.

Shine On: Brilla

"¿Están pidiendo nuestro último baile? 
Lo veo en tus ojos ... en tus ojos 
Los mismos viejos movimientos para un nuevo romance 
Podría utilizar las mentiras de siempre ... 
pero voy a cantar 
Brilla, solo Brilla...... 
................................................................... 
.....
Y cuando el silencio recibe mi último adiós 
Las palabras que necesito están en tus ojos 
Y cantaré,
Brilla, solo Brilla ....."
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